Así que a las 7:00 de la mañana estábamos saliendo para la capital en un autobús de Alsa, para llegar a la hora de comer.
No volaríamos hasta la mañana siguiente, pero preferimos no dejar nada al azar y hacer noche en Madrid.
Allí coincidimos con Alberto y Asun, que estaban de vacaciones, por lo que quedamos para almorzar en
Situado en pleno centro, a menos de 10 minutos desde la Puerta del Sol, es un restaurante de comida tradicional con un toque moderno.
Nos lo habían recomendado por lo barato y la calidad de los menus, y la verdad es que no defraudó el sitio.
Estábamos por el centro y tampoco es que hubiera muchas ganas de patear Madrid a las 3 de la tarde en julio.
Por lo que nos subimos a la terraza del Circulo de Bellas Artes, que ofrece una de las vistas más espectaculares de la ciudad.
Donde aprovechamos para tomar café y ponernos al día sobre que haríamos en Nueva York, donde nos encontraríamos 3 semanas después.
en la Calle Sagasta y nos despedimos. Nosotros aprovechamos para hacer un par de compras de última hora.
, la pizzaria de La Castellana a la que no dejo de ir cada vez que paso por Madrid.
Después de los postres, deshicimos el camino en Metro y volvimos al hotel, al día siguiente nos quedaba un vuelo de órdago.
A pesar de estar en una habitación de 10 personas, conseguí dormir bastante, pues el Safestay Madrid es bastante tranquilo por las noches.
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Breakfast @ Safestay - Madrid |
Tras el desayuno, cogimos el Metro y nos pusimos rumbo a Barajas, lo que nos costó bastante más caro de lo que recordaba.
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Metro Nuevos Ministerios - Madrid |
Una vez en el aeropuerto, nos pusimos en cola para facturar y pasar el control internacional. No habría retrasos.
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Boarding Pass - Madrid |
Sin embargo, conforme nos acercábamos al avión, nos dimos cuenta de por qué Cubana Airlines nos había costado 300€ más barato que Iberia.
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Cubana Airlines - Madrid |
El avión de marras era un Tupolev de carga de origen ruso que tenía pinta de haber vivido mejores épocas.
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Cubana Airlines - Way to Cuba |
Y es que la aerolinea del pais se mantiene a base de alquilar aviones a otros países, pues no puede mantener los propios.
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Cubana Airlines - Way to Cuba |
El caso es que parece que tampoco se deshacen en mantener los aviones que realizan trayectos de larga distancia, por lo que volar fue toda una experiencia con una chapa del techo goteando sobre mí todo el camino.
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Cubana Airlines - Way to Cuba |
Al menos nos dieron de comer, y es cierto que escuchar hablar e interactuar con la tripulación es algo a hacer como ritual para irte acostumbrando a lo que vas a encontrar en la isla caribeña.
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Aeropuerto Internacional - Santiago de Cuba |
Para colmo del surrealismo, a pesar de que el vuelo era directo Madrid - La Habana, hicimos una escala en Santiago de Cuba.
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Peso Convertible Cubano - Santiago de Cuba |
Allí aprovechamos para cambiar Euros por Pesos, y pudimos experimentar por primera vez lo que habíamos oido de la doble divisa. Una para los nativos, otra para los turistas, equivalente al Dólar.
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Cerveza Cristal - Santiago de Cuba |
Y ya que tenía efectivo, aproveché para probar una de la cerveza local más conocida, la Cristal, muy parecida a la nuestra.
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Aeropuerto José Martí - La Habana |
Finalmente despegamos y aterrizamos tras un par de horas más en el Aeropuerto José Martí en La Habana.
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Aeropuerto José Martí - La Habana |
Y mientras esperábamos las mochilas, pudimos ver como salían de la cinta de equipaje todo tipo de objetos que habían facturado en Santiago, incluyendo neumáticos.
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Aeropuerto José Martí - La Habana |
Ya con nuestro equipaje, nos dispusimos a buscar transporte hasta el hotel. Por suerte habíamos sacado dinero en Santiago, pues el cajero del aeropuerto estaba estropeado.
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Way to Habana Vieja - La Habana |
Negociamos con un taxista, pues el transporte público no era una opción y accedió a llevarnos por unos 25€.
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Hasta la Victoria Siempre - La Habana |
Por el camino nos íbamos cruzando con los famosos Frankensteins, los coches clásicos de los 50 y 60 a los que solo le queda original la carrocería.
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Plaza de la Revolución - La Habana |
Y atravesando lugares emblemáticos de la ciudad, como la Plaza de la Revolución con el relieve del Che, así como con varios edificios con propaganda revolucionaria.
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Edificio Manzanares - La Habana |
Sin duda, de los sitios más distintos en los que había estado hasta la fecha, y el hecho de que escuchar hablar español tan lejos de mi casa me descolocaba aún más.
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Hotel Mercure Sevilla - La Habana |
Finalmente, llegamos al
hotel, que nos había costado un ojo de la cara y habíamos tenido que contratar desde España.
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Catedral de la Inmaculada - La Habana |
Pero había valido la pena, el Mercure Sevilla es una casa colonial restaurada que se encuentra en pleno centro de La Habana Vieja, cerca de muchos puntos de visita obligada. Además el hotel ofrece música en directo casi todo el tiempo.
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La Bodeguita del Medio - La Habana |
Salimos a la calle y en un corto paseo estábamos en La Catedral, pasando por La Bodeguita del Medio.
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Habana Vieja - La Habana |
Lo que si nos llamó la atención fue la cantidad de prostitución presente en las calles de La Habana Vieja de manera descarada desde que pusimos un pie fuera del hotel. Es una situación a la que hay que acostumbrarse, pues al principio agobia al visitante que no va buscando ese turismo.
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Cerveza Bucanero - La Habana |
Estábamos bastante cansado, así que buscamos un sitio para cenar por la zona, y elegimos
La Dominica.
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La Dominica - La Habana |
En menos de cinco minutos, comenzó a sonar música en directo, y entre el cansancio y la cerveza que me estaba tomando, no me di cuenta al levantarme a hacer una foto y pisé un gato que se ensañó a base de bien con mi pierna.
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Gatos - La Habana |
Y es que están por todas partes de la ciudad. Me había mordido, así que tras la cena no nos quedó otra que acercarnos a un centro médico a consultar como poner la vacuna de la rabia.
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Centro Medico - La Habana |
Tras localizarlo, lo que no fue fácil, nos dijeron que al ser turistas, en el hotel tendrían vacuna para mi (para un turista), pero que no habría nada que hacer hasta el dia siguiente, por lo que no nos quedó otra que irnos a dormir.
DIA 3
En el hotel se descansaba de lujo, pero pasé la noche un poco intranquilo pensando en como solucionar el asunto del gato.
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Breakfast @ Mercure - La Habana |
Antes de ponernos manos a la obra, pasamos por el salón de desayuno del hotel, que era todo un espectáculo.
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Calle Tejadillo - La Habana |
Preguntamos en recepción y la chica nos dijo que hasta dos horas después no llegaría la enfermera del hotel, que mejor nos acercaremos a un centro médico cercano para solucionarlo allí.
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Ambulatorio - La Habana |
Lo localizamos y allí nos explicaron que no tenía por qué preocuparme, pues los gatos del centro estaban todos localizados y controlados en cuanto a enfermedades contagiosas, que me fuera tranquilo.
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Habana Vieja - La Habana |
Sonaba a coña marinera, pero nos fijamos en que la mayoría de los gatos de Habana Vieja y llevaban un collar identificativo. Aun así no me quedé muy tranquilo y llamé a mi seguro.
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Pontiac - Habana Vieja |
Me dijeron que como iba a estar menos de siete dias en Cuba, que me esperara a mi siguiente destino, pues conseguir esa vacuna siendo turista iba a ser misión imposible. Con eso di por zanjado el asunto, ya que estábamos perdiendo un tiempo precioso de nuestra estancia en la isla.
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Paseo de Martí - La Habana |
Por fin a eso de las 11 de la mañana nos pudimos poner a explorar La Habana, y nos dirigimos al Paseo de Prado.
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Paseo Del Prado - La Habana |
Con la idea de visitar el Capitoleo, que se encuentra en el mismo Paseo de Martí, un poco más al norte.
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Capitoleo - La Habana |
Encontrar una réplica del Capitoleo de Washington en la capital cubana es de lo más surrealista, pero es innegable la influencia estadounidense en la isla.
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Avenida de Martí - La Habana |
Como también lo es la española, ya no solo por el idioma, sino porque en las grandes avenidas, como el Paseo del Prado, podrías estar paseando perfectamente por la Gran Via madrileña.
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Paseo de Martí - La Habana |
Para variar, como me ocurre con todos los monumentos, el Capitoleo se encontraba en plena reforma, aunque realmente era lo menos impresionante de lo que estábamos viendo.
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Parque Central - La Habana |
El edificio quedaba eclipsado por los árboles del Parque Central, los coches restaurados de todos los colores ofrecidos a los turistas y la amabilidad de la gente.
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Floridita - La Habana |
Los Cocotaxi, medio de transporte local, parados en linea en la puerta del famoso Floridita de Hemingway, encajaban perfectamente en la postal.
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Calle Obispo - La Habana |
Volviendo al Casco Antiguo, nos metimos en la peatonal Calle Obispo buscando un poco de sombra, pues a media mañana el calor ya era insoportable.
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Vendedor de Cocos - La Habana |
Dentro de la abarrotada calle, caimos en la tentación de comprar uno de esos cocos que llevábamos viendo toda la mañana.
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Calle Obispo - La Habana |
Mientras lo tomábamos se nos acercaron una madre con su bebé pidiendo que le compráramos leche en polvo, un producto bastante común allí por la falta de neveras en las casas.
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Calle Obispo - La Habana |
Aceptamos, pero cuando nos pidió el equivalente a las raciones de un mes, lo cual llegaba casi a los 50€ en la moneda para turistas, reculamos.
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Variedades Obispo - La Habana |
Pero ya que estábamos, acordamos comprarle para 15 dias con la chica de la tienda de ultramarinos, lo cual tampoco era barato, pero más asequible.
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Calle Obispo - La Habana |
Según nos contaban, ellos cuentan con cupos mensuales para comprar en esas tiendas, pero los turistas teníamos libre acceso a todos los productos de forma ilimitada.
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Panaderia San José - La Habana |
Después de la transacción y tras agradecernos mil veces el gesto, nos fuimos, y pudimos ver claramente como la chica devolvía la leche para, presumiblemente, repartirse el dinero con la chica de la tienda de ultramarinos. Pura supervivencia.
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Plaza de Armas - La Habana |
Ya un poco más alerta, pues a pesar del buen carácter del pueblo cubano, siempre había alguien al acecho para sacarte unos CUCs (pesos convertibles), desembocamos en la Plaza de Armas, un lugar muy agradable lleno de puestos de mercadillo.
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Plaza de San Francisco - La Habana |
Continuamos por la Calle Oficios hasta la Plaza de San Francisco, donde se encuentra el Convento con el mismo nombre.
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Malecon - La Habana |
Desde ahí desembocamos a la zona portuaria del Malecón, que no era especialmente turística, por lo que rodeamos hasta el Castillo de la Real Fuerza.
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Castillo de la Real Fuerza - La Habana |
Una fortaleza militar situada junto al Malecón que data del siglo XVI y que está catalogada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
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Castillo de la Real Fuerza - La Habana |
Rodeada por un foso artificial, se puede visitar por solo 3CUC ya que en su interior alberga un curioso Museo Naval.
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Catedral de la Inmaculada - La Habana |
Nuestra siguiente parada sería la Catedral de la Inmaculada, de entrada gratuita y situada en la cercana Plaza de la Catedral.
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Catedral de la Inmaculada - La Habana |
Una vez dentro, por solo un CUC pudimos subir a la Torre del Campanario, que aunque no fuera muy alto, ofrecía buenas vistas.
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Habana Vieja - La Habana |
Con lo que si había que tener cuidado era con no hacerte un buen chichón conforme se subía por las ortopédicas escaleras.
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Habana Vieja - La Habana |
Para cuando terminamos, ya iba siendo hora de comer, por lo que buscamos un lugar cercano a la plaza.
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Bar San Carlos - La Habana |
Bajando por San Ignacio, vimos que el Hotel del Tejadillo tenía un restaurante llamado San Carlos que tenía muy buena pinta.
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Bar San Carlos - La Habana |
La sorpresa fue que entre que nos atendieron y nos trajeron la comida pasó una hora y media escuchando una música en directo de lo más estridente.
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Bas San Carlos - La Habana |
Pero el premio vino con la cuenta, pues nos metieron cerca de 20€ a cada uno, algo que nos dejó totalmente descolocados.
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Hotel Mercure Sevilla - La Habana |
Y es que nos habíamos metido en un Paladar gestionado por el gobierno, según nos dijeron después, lo que significaba que era bastante más caro. Nos fuimos a desconectar un poco a la piscina del hotel, pues a esa hora de la tarde no se podía estar en la calle con el calor que hacía.
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Hotel Mercure Sevilla - La Habana |
Cuando empezó a caer un poco el sol, volvimos a ponernos en marcha para aprovechar un poco más la jornada.
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Hotel Mercure Sevilla - La Habana |
Pero justo antes de salir, los encargados del hotel nos reunieron para darnos unos entremeses y unas piñas coladas como bienvenida, algo que nunca había visto.
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Avenida Belgica - La Habana |
Cuando terminamos, bajamos hacia el Malecón atravesando la Avenida de Belgica, una zona que estaba bastante más deprimida de lo que habíamos visto hasta ahora.
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Malecón - La Habana |
Por primera vez, un grupo de chavales, creyendo que no hablábamos español, comenzaron a increparnos. Cuando respondimos en castellano, se disculparon justificándose con un
"Es que creimos que erais americanos".
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Malecón - La Habana |
Se veía que la cosa de adorar al turista se estaba pasando cada vez más, especialmente con la posibilidad de abrir la isla al turismo americano.
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Malecón - La Habana |
Ya en el famoso Malecón, descubrimos el porqué de la fama que acompaña al paseo marítimo más famoso del mundo.
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Malecón - La Habana |
Pescadores, gente de todas las edades paseando, pubs, y sobre todo mucha prostitución inundaban el lugar a esa hora de la tarde.
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Taxi - La Habana |
Tras dar un largo paseo, optamos por desplazarnos hasta El Morro, al otro lado de la Bahia, para lo que cogimos un taxi.
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Castillo de San Carlos de la Cabana - La Habana |
Allí se encuentra el Castillo de San Carlos de la Cabana, desde donde todos los dias se produce el Cañonazo de las 9.
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Castillo de San Carlos de la Cabana - La Habana |
Tradicionalmente en la época colonial, desde esa fortaleza se pegaba un cañonazo a esa hora que marcaba el cierre de la ciudad, aun se sigue haciendo, ahora convertido en atractivo turístico para locales y extranjeros.
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Castillo de San Carlos de la Cabana - La Habana |
Y precisamente, esa distinción fue la que no hizo optar por quedarnos fuera viendo el atardecer en lugar de pasar al Castillo, por lo que nos pedían 8€, mientras que a los locales no más de 60 centimos.
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Atardecer - La Habana |
En lo alto del prado coincidimos con varios españoles más que estaban en la misma situación, lo de la doble moneda a veces era un incordio.
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Churros - La Habana |
Cuando por fin cayó el sol, tomamos unos churros con sirope, algo típico, para hacer tiempo para la cena.
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Anochecer - La Habana |
Y nos dispusimos a esperar al mismo taxista que nos había traído, aunque temíamos que como no habíamos aceptado comer en el restaurante que nos ofreció, nos iba a dejar tirados.
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Taxi - La Habana |
Así fue, así que como no quedaban mas opciones, no nos quedó más remedio que coger un taxi pirata, pues era lo único que quedaba.
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Control Policial - La Habana |
Por desgracia, nada más dejar El Morro nos paró un control. El taxista asustado nos pidió que dijéramos que nos llamábamos Rodolfo y Fernando, y que éramos sus primos.
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Taxi - La Habana |
Por supuesto, la coartada no se mantuvo por ninguna parte, y los policías nos pidieron y apuntaron los pasaportes mientras a el se lo llevaban detenido.
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Museo del Aire - La Habana |
Aun con el susto en el cuerpo, los policías muy amables, pararon un taxi en mitad de la autovía que nos llevó al hotel. El taxista nos explicó que era común, y que si no tenía antecedentes no tendría problemas.
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Hotel Ambos Mundos - La Habana |
Cenamos en el hotel y allí coincidimos con Gema y Judith, dos catalanas con las que compartimos impresiones, a ellas les ha ido peor, pues su supuesto guía les ha levantado 100€ en todo el dia sin apenas ver nada.
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Hotel Ambos Mundos - La Habana |
Vamos a dar una vuelta por Habana Vieja, y nos dejamos caer por el Hotel Ambos Mundos, que se encuentra rodeado de cubanos jóvenes intentando pillar algo de Wifi. Nos tomamos unos mojitos y damos el día por finalizado.
DIA 4
Nos pegamos una buena mano de desayunar antes de echarnos a la calle, la variedad del hotel era espectacular.
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Crepes - La Habana |
Teníamos que solucionar un problema, queríamos dormir la noche siguiente en El Varadero, pero visto lo visto, improvisarlo nos iba a costar más de 500€ por cabeza.
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Sevilla Mercure - La Habana |
Así que intentamos reservar habitación para esa misma noche sobre la marcha, pero al no hacerlo a través de un tour operador extranjero, la cosa se nos ponía en 250€ cada uno, lo cual también era una locura.
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Museo de la Revolución - La Habana |
La situación era ridícula. Finalmente, contactamos con Halcón Viajes Motril y conseguimos que nos reservaran una noche más por 100€.
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Museo de la Revolución - La Habana |
Sabiendo donde dormiríamos, reservamos una excursión a Viñales para el dia siguiente y nos fuimos a visitar el Museo de la Revolución, de nuevo con precios divididos en CUPs y CUCs.
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Museo de la Revolución - La Habana |
Situado en el antiguo Palacio Presidencial, el museo es una mezcla de exposiciones temporales y una gran muestra de memoria cubana.
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Museo de la Revolución - La Habana |
Incluyendo los todavia visibles impactos de bala del intento de asesinato del presidente Fulgencio Batista en 1957.
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Museo de la Revolución - La Habana |
El museo es bastante interesante, con tres plantas divididas entre la Cuba Contemporánea, la historia de la Revolución Cubana y la Etapa Colonial.
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Museo de la Revolución - La Habana |
Aun así, algunos datos como que Los Estados Unidos trataban las nubes con químicos para dañar las cosechas cubanas eran bastante irrisorios.
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Vistas desde el Museo de la Revolución - La Habana |
A la salida ya es prácticamente hora de comer, y habíamos reservado para comer en Paladar Doña Eutimia.
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Paladar Doña Eutimia - La Habana |
Situado muy cerca de la catedral, este acogedor restaurante tiene bastante fama de ofrecer típica comida cubana a precios contenidos.
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Paladar Doña Eutimia - La Habana |
Y no nos defraudó, ya desde la recepción nos ofrecieron mojitos y unas croquetas para ir abriendo boca.
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Paladar Doña Eutimia - La Habana |
Por poco más de 10€ incluyendo postre, por fin habíamos conseguido almorzar en condiciones en un restaurante desde que llegamos.
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Paladar Doña Eutimia - La Habana |
Cuando volvíamos de camino al hotel, pues no se podía estar en la calle a esa hora, pasamos por la puerta de La Bodeguita del medio.
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La Bodeguita Del Medio - La Habana |
Estaba bastante animada para ser las 4 de la tarde, y había un grupo, cuyo cantante era un niño de apenas de 12 años, actuando.
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La Bodeguita Del Medio - La Habana |
Y eran un autentico espectáculo, por lo que nos quedamos un buen rato escuchándolos mientras nos tomábamos un mojito.
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La Bodeguita Del Medio - La Habana |
Valió la pena la parada, además de por el ambientazo que había, porque caminar por las calles a esa hora era un suplicio.
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La Bodeguita del Medio - La Habana |
Ya aprovechamos para estampar nuestra firma dentro del restaurante, en cuyas paredes no quedaba un hueco libre.
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La Habana Vieja - La Habana |
Y posteriormente deshicimos el camino hasta el hotel para disfrutar de otra tarde de piscina hasta que bajara un poco la temperatura.
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Parque Central - La Habana |
Cuando pudimos volver a salir, nos encaminamos directamente al Parque Central para contratar otra de las atracciones típicas de la ciudad.
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Paseo Martí - La Habana |
No existe mejor forma de obtener una visión panorámica de la capital de Cuba que subirse en uno de los coches clásicos con conductor.
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Barrio Chino - La Habana |
Estos coches de lo más pintoresco son conocidos como "Frankensteins" ya que fueron dejados por los americanos y han sido reconstruidos a base de piezas de muchos otros coches.
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Centro Habana - La Habana |
Suelen rondar los 30€ el paseo de una hora, pero siempre se puede negociar, especialmente si te dejas caer al atardecer.
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Monumento a José Martí - La Habana |
En nuestro caso, el conductor que nos tocó fue Normando, y nos cobró tan solo 20€ por ser el último servicio que haría ese día.
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Plaza de La Revolución - La Habana |
Normando era un apasionado de Fidel Castro, que además de hacernos de guía turístico, nos ilustraba contándonos las maravillas del regimen comunista.
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Puerta de La Paz - La Habana |
Nuestro recorrido comenzó en las puertas de La Habana Vieja, desde nos dirigimos al oeste para adentrarnos en Habana Central.
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Normando por El Malecón - La Habana |
Pasamos por China Town, un curioso reducto de la población China que había ido llegando a la isla entre finales del Siglo XIX y principios del XX.
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Hotel Nacional - La Habana |
Continuamos hacia Vedado, una zona de la ciudad un poco alejada del centro, y desde la que nos introdujimos en Miramar.
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El Malecón - La Habana |
Para cuando estaba comenzando a anochecer, deshicimos el camino por la costa hasta llegar de nuevo al Malecón, pasando por delante del famoso Hotel Nacional.
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Parque Central - La Habana |
Para finalizar el viaje de nuevo en el Parque Central, frente al Capitoleo. Sin duda había sido de los mayores aciertos del viaje.
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Floridita - La Habana |
De camino de vuelta a nuestro hotel pasamos por delante del Floridita con su famosa iluminación nocturna.
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Sevilla Mercure - La Habana |
Pero optamos por cenar en la última planta de nuestro hotel, de cuyo restaurante ya nos habían hablado.
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Panorámica - La Habana |
Cuando vimos los precios, nos lo pensamos mejor y nos decantamos por cenar algo en el restaurante de la planta de recepción que era bastante más asequible.
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Panorámica - La Habana |
No sin antes hincharnos a hacer foto del espectáculo nocturno de La Habana que ofrecían las ventanas de la azotea en la que se ubicaba el restaurante.
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Ciego Montero - La Habana |
Así que tras la cena y un buen ron con Ciego Montero (la Coca Cola local), nos fuimos a dormir, pues al día siguiente nos esperaba un madrugón de órdago.
DIA 5
El despertador sonó a las 6:30, teníamos por delante una excursión a Viñales y nuestro autobús nos recogería a las 7:30.
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Desayunos Sevilla Mercure - La Habana |
Por suerte, el desayuno ya se encontraba disponible, y nos pudimos dar un buen atracón antes de que llegara el transporte.
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El Malecón - La Habana |
Se retraso casi media hora, y nos pusimos rumbo al oeste de la isla pasando por el Malecón mientras terminaba de amanecer.
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Camino a Viñales - Cuba |
Conforme nos alejábamos de la capital, la vegetación se hacía más tropical, mostrando el paisaje caribeño que había imaginado en la isla.
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Centro turistico "Las Barrigonas" - Cuba |
Tras una hora de viaje en el autobús que era bastante cómodo, hicimos una para técnica en un restaurante.
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Centro turistico "Las Barrigonas"- Cuba |
El sitio resultó ser de lo más vistoso, con una palapa y un lago en su parte trasera que parecía sacado de una postal.
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Centro - Viñales |
Finalmente, tras casi otra hora en carretera, que estaba en bastante buen estado, llegamos al pueblecito de Viñales.
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Centro - Viñales |
Un pueblecito bastante pequeño perteneciente a la provincia de Pinar del Rio que poco tenía que ver con La Habana.
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Destileria "La Occidental" - Viñales |
De ahí nos llevaron directamente a la Destilería "La Occidental", una parada en la que nos explicaron como se fabricaba la "Guayabita", como llaman al Ron.
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Destileria "La Occidental" - Viñales |
Por supuesto, la visita no era casual, pues acabamos derivando en la tienda donde nos quisieron colocar botellas después de una pequeña degustación.
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Valle de Viñales - Viñales |
De vuelta al autobús y tras 45 minutos más en carreteras un poco más enrevesadas, llegamos a la mayor atracción de la excursión.
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Valle de Viñales - Viñales |
El espectacular Valle de Viñales, que se extiende a lo largo de kilómetros con un espesor verde difícil de equiparar.
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Elaboración de puros - Parque Nacional Viñales |
También nos llevaron a una finca donde pudimos ver cómo se elaboraban puros cubanos, y hasta tuvimos ocasión de probarlos.
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Elaboración de puros - Parque Nacional Viñales |
Consideramos la opción de comprar un par de cajas como souvenir, pero los precios no eran nada asequibles.
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Mural de la Prehistoria - Parque Nacional Viñales |
Posteriormente nos llevaron unos minutos más en autobús a través del parque nacional hasta el Mural de la Prehistoria, uno de los mayores frescos al aire libre.
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Finca San Vicente - Parque Nacional Viñales |
Tras ofrecernos un cocktail en el mismo mural, nos llego la hora de almorzar en un restaurante enfocado a los tours que pasaban por allí a diario.
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Finca San Vicente - Parque Nacional Viñales |
La
Finca de San Vicente se integraba perfectamente en el entorno selvático del Parque Nacional de Viñales.
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Finca San Vicente - Parque Nacional Viñales |
Una cabaña sin paredes en la que nos sirvieron un menú de tres platos con postre, que no era de lo mejor que habíamos probado en Cuba, pero que nos entró bastante bien a esa hora.
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Finca San Vicente - Parque Nacional Viñales |
Tras la comida nos desplazamos hasta la siguiente parada en la ruta, la conocida como La Cueva del Indio.
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Cueva del Indio - Parque Nacional Viñales |
A la entrada de dicha cueva hay una pequeña representación de un pueblo indígena, que fue descubierto en 1920, con actores y actrices haciendo de lugareños.
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Cueva del Indio - Parque Nacional Viñales |
Y pasando el pueblo, al subir una escalinata colindante, accedimos a la cueva que se encontraba tenuemente iluminada.
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Cueva del Indio - Parque Nacional Viñales |
Pero lo suficiente para dejarnos observar las impresionantes estalactitas y estalagmitas que inundaban el techo.
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Cueva del Indio - Parque Nacional Viñales |
Como sorpresa, nos pusimos a hacer cola para montar en unas lanchas motoras que nos llevarían al exterior de la cueva a través de un cañón.
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Cueva del Indio - Parque Nacional Viñales |
Sorprendentemente, a lo que menos importancia le habíamos dado, resultó ser lo más espectacular de la visita a Viñales.
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Mirador de Los Jazmines - Viñales |
Como última parada para comprar algo de beber, nos dejaron en el Mirador de Los Jazmines, desde donde pudimos observar los Mogotes, las montañas redondeadas del parque.
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Mirador de Los Jazmines - Viñales |
Y para las 6 de la tarde comenzamos a deshacer el camino de vuelta a La Habana, hasta donde nos quedaban dos horas de trayecto.
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Hotel Nacional - La Habana |
Para colmo, nuestro hotel era el último del recorrido, así que hasta casi las 21:00 no pudimos darnos una ducha para salir a cenar.
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Habana Vieja - Habana |
Casi a las 22:00 nos echamos a las calles de La Habana Vieja a buscar un sitio para celebrar mi cumpleaños.
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Barroco - La Habana |
El día anterior habíamos ido a tomar un tentempié al Barroco, un pequeño restaurante cercano a la Plaza de la Catedral.
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Barroco - La Habana |
Y fue el sitio elegido para cenar, pues tenía una terraza de lo más apetecible y la temperatura había bajado por fin esa noche.
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Plaza de La Catedral - La Habana |
Después fuimos a tomar un par de rones por La Habana Vieja antes de dar el día por finiquitado y despedirnos, pues al día siguiente nuestras compañeras de viaje emprenderían caminos distintos.
DIA 6
Era nuestro último día completo en La Habana. Originalmente habíamos contado con amanecer en Varadero, pero por asuntos de logística tuvimos que cambiar el plan.
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Mercure Sevilla - La Habana |
Por ello nos encontramos con un día extra en la capital cubana, que nos íbamos a tomar con toda la calma del mundo.
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Panorámica - La Habana |
Comenzamos con el desayuno, para pasar directamente a disfrutar del último rato de piscina en el Sevilla Mercure.
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Panorámica - La Habana |
Para luego subir a la última planta del hotel para tomar unas fotos de la vista panorámica de la ciudad desde el restaurante.
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Floridita - La Habana |
Tras eso, dejamos las maletas en consigna, pues esa noche dormiríamos en otro hotel, también por temas de logística, pues siendo turista, reservar directamente en el mostrador de un hotel cubano te puede costar un ojo de la cara.
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Floridita - La Habana |
Y por fin nos dejamos caer por el Floridita, la cuna del Daiquiri, el bar más frecuentado por Hemingway en sus años en Cuba.
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Patio de los Artesanos - La Habana |
Luego enfilamos la Calle Obispo para dar por casualidad con el Patio de los Artesanos, un pequeño mercadillo de objetos hechos a mano.
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Patio de los Artesanos - La Habana |
O nos habíamos acostumbrado, o ese día hacía bastante menos calor para pasear a esas horas de la mañana, pues la temperatura era muy agradable.
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Plaza de Armas - La Habana |
Desembocamos en la Plaza de Armas, que también se encontraba de mercadillo ese dia. En este caso, de objetos de segunda mano y antigüedades.
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Parque Central - La Habana |
Deshicimos el camino hasta el Parque Central con sus Frankensteins, ya que nos habían recomendado un restaurante para almorzar por esa zona.
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Capitoleo - La Habana |
Frente al Capitoleo, se encuentran unos edificios coloridos con soportales donde hay varios restaurantes frecuentados por los lugareños.
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Cola para Los Nardos - La Habana |
Aunque en
Los Nardos también admiten a turistas, es curioso encontrar un sitio tan asequible en pleno Paseo de Martí.
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Los Nardos - La Habana |
Es por ello, que la cola de la puerta puede tirar un poco para atrás, aunque hay mucho tránsito y se consigue mesa en poco tiempo.
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Los Nardos - La Habana |
El sitio era de lo más barroco, muy tenue e iluminado con velas en su gran mayoría, pero de los menús más ricos que comimos en Cuba.
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Los Nardos - La Habana |
De nuevo en la calle, con el sol que estaba cayendo, vimos el momento de recoger el equipaje y usar un rato la piscina de nuestro nuevo hotel.
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Cocotaxi - La Habana |
Nos tendríamos que desplazar hasta Vedado, muy cerca de la conocida como Rampa Habanera, un sitio bastante turístico.
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Cocotaxi - La Habana |
Así que aprovechando que íbamos ligeros de equipaje, optamos por probar uno de los famosos Cocotaxi, que eran bastante más baratos.
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Cocotaxi - La Habana |
Una buena experiencia en general, excepto cuando nos parábamos junto a una de las tartanas en algún semáforo, ya que nos tragábamos todo el humo negro de los escapes.
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Roc President - La Habana |
Y tras unos 15 minutos, llegamos al Roc President, el que sería nuestro hotel por una noche, en el limite con Habana Central.
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Panoramica - La Habana |
En este caso, la prostitución dentro de la piscina del hotel era mucho más obvia a simple vista, con parejas con diferencia de edad bastante llamativa.
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Panorámica - La Habana |
Las vistas desde la planta décima en la que nos alojábamos estaban bien, pero la panorámica de esa parte de la ciudad distaba mucho de la postal de La Habana Vieja.
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Habana Central - La Habana |
Cuando salimos a la calle a dar una vuelta, nos dimos cuenta que estábamos en una ciudad muy distinta a la del barrio de donde veníamos.
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El Malecón - La Habana |
Calles residenciales, amplias avenidas e incluso partes del malecón sin ningún transito recién asfaltadas.
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El Malecón - La Habana |
Continuamos por el paseo marítimo hasta que dimos con un edificio de lo más rocambolesco que resultó ser la Embajada de USA.
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Patria o Muerte - La Habana |
Convenientemente rodeada de un bosque de banderas de Cuba y consignas como Patria o Muerte, perfectamente visibles desde cualquier ventana del edificio "yanki".
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Hotel Nacional - La Habana |
Acabamos desembocando en el Hotel Nacional, símbolo de la ciudad, al que pasamos para dar una vuelta.
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Hotel Nacional - La Habana |
Sin duda alguna, lo más llamativo son sus terrazas mirando al Océano Atlántico donde había varias parejas realizando sus reportajes de boda.
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Rampa Habanera - La Habana |
De vuelta a la ciudad, subimos hasta el centro neurálgico de Vedado, abarrotado de bares y restaurantes.
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Arte en la Rampa - La Habana |
Cada vez estábamos más convencidos de que había sido un acierto quedarse a dormir en La Habana Vieja durante nuestra estancia, pues esta zona se asemejaba mucho a cualquier otra centro urbano.
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Arte en la Rampa - La Habana |
Dimos con un pequeño festival con música en directo y artesanías llamado Arte en la Rampa, ubicado en un pequeño centro comercial.
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Arte en La Rampa - La Habana |
Al salir, nos encontramos con la Heladería Coppelia, famosa por su gran variedad de sabores y otros dulces.
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Heladería Coppelia - La Habana |
Pero no teníamos ni idea de que era exclusivamente para Cubanos, y un policía nos echó en lugar de explicarnos que había un puesto solo para turistas.
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Vedado - La Habana |
Un poco contrariados, decidimos volver hasta el hotel, ya que queríamos ver atardecer desde el malecón.
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Taxi Tuneado - La Habana |
Como la temperatura había bajado, nos quedamos sentados bastante rato mientras caía el sol a pesar de que estaba un poco nublado.
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Atardecer en El Malecón - La Habana |
Y cuando por fin se puso, nos dimos cuenta de que habíamos estado encima de la zona de picadero más frecuente de todo el paseo, pues había decenas de condones usados por toda la acera.
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Condones en el Malecón - La Habana |
Después de la coña, pensamos que lo mejor era quedarse a cenar en el mismo hotel pidiéndonos unos sandwiches y descansando un poco.
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Roc President - La Habana |
Encargamos un taxi privado para la mañana siguiente, pues volábamos muy temprano y no queríamos arriesgarnos a que no hubiera uno público.
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Tormenta Tropical - La Habana |
Y nada más subir a la habitación estalló una tormenta tropical de lo más bestia que dejó las calles inundadas, suerte que ya estábamos a cubierto, una buena postal para despedir los calurosos días que habíamos pasado en el pais.
Continua en De La Habana a Nueva York (Parte 2)
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