<H1> Una visita a Exeter </H1>

- Fecha: Del Viernes 5 de Marzo a Domingo 7 de Marzo de 2004 (3 DIAS)
- Pais: Reino Unido.
- Ciudades Visitadas: Londres, Bristol, Exeter, Stonehenge, Bath y Oxford.
- Medio de Transporte: Coche de alquiler (Ford Focus)
- Acompañantes: Javier Palma, Nani y Marimar.
- Sonaba en la radio: Turn me on, Superstar & Somebody to love.
- Presupuesto aproximado: 180€

El itinerario:

Mapa de la ruta

Este fue el primer viaje que realicé echándome la mochila al hombro y sin un itinerario fijo. Había trabajado durante la campaña de navidad como camarero en un catering (Mecco, creo que se llamaba) y aun me quedaba un dinerillo ahorrado, así que no tuve que pedir ningún préstamo a casa. 

Ese año estaba de beca Erasmus en Londres, y tenía 20 años. Anteriormente nunca me había planteado alquilar un coche para irme de viaje, (nunca me había planteado irme de viaje como tal) todo se limitaba a trenes o autobuses (las lineas low-cost aun no eran una opción tan común como ahora). Marimar, Nani y yo ya eramos amigos desde antes de vivir en Londres, ambas son de Granada y yo llevaba ya estudiando allí dos años antes de la beca. Al ser compañeros de carrera compartiamos varias asignaturas y por casualidad acabamos yéndonos los tres de Erasmus a la universidad de Queen Mary & Westfield, al este de Londres, y para más inri, acabamos viviendo en la misma residencia en pleno centro de la capital inglesa. 

A la vuelta de navidades, Javi "el Wey"·se incorporó a las filas de la residencia. Es cinco años mayor que nosotros, estaba haciendo un doctorado en Imperial College y antes de conocernos ya llevaba tiempo viajando, se había recorrido medio Estados Unidos en coche y se movía mucho por su país, Mexico. Por eso cuando le comentamos que teníamos pensado ir a ver a Bea, otra amiga de la pandilla, que estaba estudiando en Exeter, no dudo en apuntarse y proponer alquilar un coche como medio de transporte, pudiéndonos parar por las ciudades que nos interesaran en el camino. 

DIA 1

Así que nos pusimos rumbo a Exeter la tarde del Viernes, con la idea de llegar al anochecer. Cabe decir que fue la primera vez que conduje un coche por autovia, puesto que a pesar de llevar dos años con carné de conducir, en Ceuta lo máximo que hay son carreteras convencionales, y era allí donde tenía coche. Así que primera vez en carretera, y por la izquierda. 

Conduciendo a la "inglesa"

Para todos/as aquellos/as que nunca os hayais atrevido a conducir un coche con el volante en la derecha, solo deciros que se tardan 2 minutos en coger el tranquilo. Siempre y cuando tengais tráfico en el que fijaros, no hay problema, lo malo viene cuando os quedais solos, sobre todo en carreteras nacionales, y automáticamente, entra el lado del cerebro que activa lo cotidiano y os veis conduciendo en dirección contraria. No obstante, es una experiencia que recomiendo a si os gusta conducir.  

Así que de camino a nuestro primer destino hicimos una parada para estirar las piernas a unos 200km. Y la ciudad elegida fue Bristol. Era la primera vez que veía una ciudad inglesa que no fuera Londres, y como fui descubriendo posteriormente, si esperas encontrar algo parecido a la capital, te vas a llevar una decepción. Para colmo, Bristol no es especialmente atractiva, y como sólo estábamos de paso, solo visitamos un par de monumentos céntricos mientras estirábamos las piernas (Tampoco creo que haya mucho más). 

Catedral de Bristol

 Justo en el centro encontramos la Catedral de Bristol y también a distancia de camino, la Capilla de Buckingham. 

Capilla de Buckingham

Tras pasear un par de horas por las calles del centro y tomarnos un tentenpie, continuamos conduciendo el trecho de 130km. que nos quedaba para llegar a Exeter. Llegamos a eso de las 9 de la noche, y allí nos esperaba Bea, en la residencia de la Universidad. No hay mucho que contar de Exeter, solo decir juerga Erasmus, y por supuesto conocer los locales frecuentados por los universitarios, especialmente el Arena, una discoteca al más puro estilo español. 

Noche en el "Arena"

Pintas hasta las tantas de la noche y después continuamos en las zonas comunes de la residencia dentro del campus hasta las 1000. Por suerte, la hospitalidad española se hizo presente y nos hicieron un hueco en la residencia, recuerdo a Javi durmiendo en el somier de la cama y yo sobre el colchón tirado en el suelo en el dormitorio de Manolo. A la mañana siguiente, tras desayunar, nos despedimos pronto para aprovechar el día. Nos llevamos muy buen recuerdo de esa fiesta e incluso más tarde, volveríamos a coincidir en Londres con varios del grupo, entre ellos Manolo, que nos había cedido la habitación.

DIA 2

Otro de los atractivos del viaje, fue visitar Stonehenge, el famoso monumento megalítico que está cerca de Amesbury. Allí va gente de todo el pais a celebrar el solsticio de verano, por lo que es fácil encontrarlo vacío en invierno, como fue el caso. 

Stonehenge

Cabe decir que la carretera A303 se las trae. Es bastante divertida de conducir, pero se tardan casi 3 horas en recorrer los 150km. que separan Exeter de Amesbury. Además, para aquellos que tengais pensado visitar este monumento, ya sea desde Londres o cualquier otra ciudad que no se encuentre muy lejos, que se plantee como un viaje que incluya esto en la ruta, y no como destino. Es impresionante, pero a la vez no tiene absolutamente nada interesante alrededor, ya que está en un punto intermedio entre Southampton, Bristol y Londres. 

Lo que nosotros planteamos fue terminar ese dia en Bath, y a ser posible todavia con luz para aprovechar y hacer un poco de turismo. Error, puesto que tardamos muchísimo en hacer los tramos y se nos hizo de noche. Tuvimos que parar a cenar en un McDonalds y ya que no íbamos a hacer turismo de noche, decidimos buscar algo en las afueras de Bath, que iba a ser más barato. Finalmente, y por suerte, localizamos un hostal de carretera, (que en Inglaterra no se distinguen mucho de las casas normales) regentado por un matrimonio y en el que pudimos pasar la noche bastante cómodos, y por un precio de 20€ por cabeza. 

Hostal familiar a las afueras de Bath

DIA 3

A la mañana siguiente, tras desayunar (estaba incluido en el precio), y aprovechando el dia soleado, nos acercamos a Bath. 

Bath Circus

Esta pequeña ciudad si que vale la pena para echar al menos un dia, si hubieramos planteado el viaje de otra manera, quizá Bath hubiera sido la preferencia. Declarada patrimonio de la humanidad por la UNESCO, da gusto pasear por su centro historico, desde el Circus hasta el Puente de Puttney pasando por la Plaza de la Abadia.

Parte trasera de la Abadia.

Después de pasar la mañana por el casco antiguo, como todavía nos quedaba un día completo para devolver el coche, y además no queríamos pagar el Congestion Charge de Londres (tasa para acceder al centro hasta cierta hora del día) decidimos desviarnos de nuestro camino y pasar por Oxford, lo que fue un gran acierto.

Granizada en High St. (Oxford)

El único problema, como casi siempre en Inglaterra, fue el tiempo. Despues de un día soleado en Bath, a tan solo 100km al norte nos calló una granizada bastante curiosa, como se puede apreciar. Por suerte a la hora y media empezo a amainar y pudimos disfrutar de un poco de turismo por la zona de las universidades.

Lateral de la catedral de Christ Church.

Comenzando por un paseo por High Street, donde almorzamos y llegando a la zona de las universidades por  New College Lane, todo en Oxford rezuma ambiente universitario, con cientos de estudiantes. Recuerdo que me llamó la atención ver el fondo del rio Támesis lleno de bicicletas muriéndose de óxido. Por lo visto a veces las roban y las acaban tirando ahí cuando ya no hace falta.

New College Lane

Posteriormente, a eso de las seis de la tarde decidimos poner rumbo a Londres. Siendo Domingo, el tráfico nos dio un respiro, así que cogimos la M-40 que nos llevó directos a Edgware Road, en 1 hora aproximadamente. donde teníamos el Rent-a-car, prácticamente en la misma puerta de casa. Allí nos despedimos de nuestro Focus, que nos había servido de "nave",como decía Javi, durante nuestra pequeña escapada de fin de semana, para al dia siguiente volver a retomar las clases.

   "Como conclusión de este primer viaje, recuerdo  la falta de autovías y autopistas en el Reino Unido en cuanto te alejas un poco de Londres, y sobre todo, las ganas de volver a ponerme al volante para hacer otra escapada."